Esta muestra es una selección de once representantes articuladores en la gestión del ecosistema alrededor del Diseño, todos vinculados desde diferentes territorios con proyectos que tienen más o menos vitrina, pero con impacto en sus entornos mas próximos, con un alto potencial transformador y cruce interdisciplinario.
Es una selección de agentes intermediadores que liderados desde el Diseño aportan en la economía de sus localidades o comunidades, generando nuevas capacidades, implementando procesos, re-instalando lenguajes, mediando con públicos o mejorando hábitos.
Desde esa mirada se desarrolló un mapeo nacional en base a una lista de nueve dimensiones dejando de manifiesto que la discipina es un actor presente y eslabón clave en desafíos nuevos, es decir el Diseño esta al centro del cambio, con proyectos que promueven el bienestar y la reflexión de las personas, la sociedad y el medio ambiente, usando diferentes plataformas y presentes en distintos territorios del país, con un foco en el potencial de internacionalización de cada uno de ellos:
- Multiplicadores del tejido social, la capacidad de interpretar la tradición anclada en una comunidad y potenciarla, fomentando el trabajo asociativo desde la instalación de herramientas nuevas fomentando asi la transferencia de prácticas que aporten sostenibilidad económica a una comunidad.
- Generadores de acciones regenerativas en la comunidad, proyectos dinamizadores de territorios, re-instalando narrativas, lenguajes, experiencias en base a un patrimonio vivo y pre-existente que permite vincular nuevas relaciones hacia la producción, innovación y desarrollo metodológico para la apropiación de la historia identitaria.
- Contenedores de narrativas culturales, comunicar el anclaje con el territorio o las relaciones y las tradiciones con las que se convive en entornos particulares, permitiendo la visibilización del valor hacia la educación y la mediación con públicos, utilizando herramientas propias del Diseño como la gráfica, la materialidad y la reinterpretación simbólica de la identidad existente.
- Visibilizadores de vanguardias, plataformas que se presentan como un puente entre los públicos y las propuestas de Diseño actuales, adaptándose a contextos del mercado, presentando nuevos relatos en sintonía con las tendencias globales pero con relatos locales.
- Puentes con el patrimonio, explorando los nuevos imaginarios socioculturales en diálogo con el material y los lenguajes, para la creación de nuevos objetos, indumentarias o gráficas que respondan a necesidades contemporáneas ancladas en el respeto patrimonial de lo ancestral.
- Innovadores en lo excluido, escenarios nuevos de exploración y experimentación, en donde la participación distribuida y las lógicas del prototipado tan afines al Diseño ponen en el centro aquello que las personas pueden tener en común: mejorar su calidad de vida.
- Transformadores urbanos, proyectos que apoyan y tejen alrededor de las personas y los colectivos que hacen ciudad, generando espacios de difusión, comercialización y mediación para prácticas que desarrollan identidad.
- Dinamizadores de territorios, proyectos presentes en entornos específicos que aportan con impacto a sus comunidades mas próximas con trabajo interdisciplinario coherente a las necesidades, recursos y potencialidades propias desde lo económico, medioambiental y social.
- Transformadores en lo necesario, Diseñando en sintonía con las necesidades reales, conscientes de las urgencias sociales y medioambientales, insertado y conectado en escenarios complejos que requieren propuestas nuevas.
En estas variables se anclan los once representantes que impactan en diferentes ámbitos de la sociedad: Fundación Saber Hacer (Santiago), Fundación Madrugada (Concepción), Fundación Ariaka (Arica), Qiri (Arica), Encuentro Local (Santiago), LUP (Santiago), Fab Lab Austral (Puerto Williams), Impresionante (Santiago), Fundación Rekaba (Puerto Varas), Marchantes (Antofagasta), Labva (Valdivia).
En esta selección, queda manifiesto que el Diseño es una disciplina que además transita en todos sus eslabones de la cadena de valor por las distintas áreas de la Economía Creativa, integrando la participación, conectividad, innovación, accesibilidad, diversidad y experimentación hacia la consolidación y apertura a nuevos públicos y mercados, desde lo intangible como la sistematización de procesos y metodologías, la adaptabilidad constante en los cambios de contextos, el aporte desde los lenguajes estéticos, la reflexión en el levantamientos de oportunidades desde problemáticas cotidianas, la co-creación, la eficiencia en los procesos de producción; y también desde lo tangible, cómo el uso de nuevas materialidades, la transformación de la materia, la creación de objetos con usabilidad, la inserción tecnológica y el prototipado.
Desde la aparición y uso masivo del concepto Desing Thinking se instala una nueva forma de entender el rol de los diseñadores en la sociedad, incorporando una manera de pensar y resolver problemáticas en donde el sector puede participar de forma activa en áreas como la ingeniería, gastronomía, turismo, medioambiente, servicios. La empatía, las personas, el prototipado renovaron el paradigma del Diseñador como un hacedor de ojetos o gráficas, presentándolo ahora desde la gestión global de proyectos y empresas.
Las condiciones actuales en constante transformación, requieren enfrentar desafíos con lógicas nuevas, dinámicas que permitan re-instalar la historia y tradición en cruce con las tecnologías de vanguardia y cultura digital, reflexionando sobre la eficiencia de los recursos, tomando como guí